La Reserva de la Biosfera Torres del Paine, un espacio sin par y una de las grandes Mecas para el estudio e investigación de las áreas vírgenes del planeta, compone un entorno natural y humano ya reconocido en 1978 con la declaración de Reserva de la Biosfera como modelo idóneo para el desarrollo de la Sostenibilidad.

Aún quedan muchas mejoras, en especial en lo social, donde se encuentre una mayor equidad social. También en materia de visibilización de los objetivos declarativos de la Reserva de la Biosfera, como sucede en muchas otras reservas del mundo y algunas cuestiones en materia de conservación.

Actualmente, el turismo se constituye como casi la única vía de ingreso comercial, por ello su gestión debe apoyarse más intensamente en el desarrollo de otras facetas de promoción, tanto de los recursos naturales del territorio, como de los culturales e históricos de una población que puede llegar a perder su identidad histórica y así su acervo cultural. Por ello, se debe facilitar y potenciarse una amplia participación pública en la gestión de la Reserva, que permita a su vez, una mayor participación en el aprovechamiento equitativo del recurso turístico por parte de la población.

Todos los interesados en el medio natural y humano en las áreas rurales, debemos hacer por visitar al menos alguna de las Mecas de la naturaleza y esta es sin duda una de ellas, donde su visita hace cumplir nuestros sueños.